LIBROS DE CONSUMO VERSUS LITERATURA
Están todos los escritores con los que yo me relaciono, revolucionados, o más bien indignados. Se trata, como ya podéis suponer por la foto que ilustra este comentario, del libro que le han publicado a Belén Esteban, aunque más bien yo diría que se trata de un artilugio editorial para mentes delgadas, para personas de consumo literario escaso. Pues bien, del artilugio se han vendido más de 100 mil ejemplares, y eso, aunque no debería, indigna e invita a la reflexión y/o al comentario procaz y al sarcasmo furibundo.
Pues miren, no vale la pena. Aquí cada uno a lo suyo, porque ¿qué se puede esperar de un país en el que la canción más descargada es la de Paquirrín, la película más vista cualquiera de las de Torrente y el libro record de ventas el de la señorita objeto de este comentario? Pues eso. Además, nosotros jugamos en otra liga, ¿o no?
De todas formas hay que felicitar a Espasa por haber tenido la inteligencia comercial de no hacer que Belén figure como escritora-autora del libro, ya que nadie se lo hubiera creído, y le ha puesto a otro sujeto curtido en las lides televisivas, las mismas a las que pertenece Belén. Y aunque considero a Boris Izaguirre otro fraude «literario» por mucho que fuera finalista del Premio Planeta en el 2007, al menos salva la poca dignidad que pudiera tener la susodicha publicación.
Y voy a obviar el comentario sobre el título del libro. ¿Reflexiones?